¡Esta ciudad nunca falla! Y todo gracias a su gente, es increíble todo lo que he vivido en estos dos días:

Hubo quienes fueron buscándome porque el año pasado conocieron a Mario y querían conseguir la segunda parte.

También hubo quienes, al verme, se acordaron de mí y de la historia del Cubito de Rubik.

Gente que se paraba para escucharme hablar de la importancia de las decisiones que tomamos.

¡Hasta llegaron a hacer corrillos para participar!

Que, casi casi, se agotaran los ejemplares de Mario el primer día.

Que mi caseta fuera la última en cerrar, fue gracias a vosotros ❤‍🩹

Que, en el hotel en el que me alojaba, ¡me reconocieran y quisieran mis libros!

Que, una vez más, vuelva enamorada de esta ciudad no es casualidad.

¡Gracias a todos por el apoyo que me habéis brindado! ¡Sois únicos!